Vecinos y trabajadores de la localidad de Tanti han manifestado su profunda preocupación ante reiteradas denuncias por presuntos malos tratos laborales que tendrían lugar en el Supermercado Casa Romero, un comercio de amplia concurrencia en la zona.
Según relatan empleados actuales y ex empleados, la madre de quien se presenta como dueña del establecimiento —una mujer de nacionalidad china que tendría un rol activo en la gestión diaria— mantendría conductas de trato agresivo hacia el personal, incluyendo gritos, humillaciones verbales y, en algunos casos, situaciones que habrían derivado en denuncias por malos tratos físicos.
A esta grave situación se suma otro aspecto de extrema preocupación: según los testimonios recogidos, la totalidad de los empleados trabajaría en condiciones de informalidad, sin estar debidamente registrados. Esto implicaría que los trabajadores no realizan aportes jubilatorios, no cuentan con obra social, ni con seguro laboral, quedando completamente desprotegidos ante enfermedades, accidentes o eventualidades propias de la actividad.
De confirmarse estas denuncias, se trataría de una vulneración múltiple de derechos laborales básicos, afectando no solo la integridad física y psicológica de los trabajadores, sino también su presente y su futuro previsional. Muchos de ellos aseguran haber permanecido en silencio por temor a represalias o a perder su fuente de ingresos, en un contexto económico adverso.
Desde distintos sectores de la comunidad se remarca que ninguna actividad comercial puede sostenerse a costa de la dignidad humana ni del incumplimiento de las leyes laborales vigentes, y que el desarrollo económico local debe ir acompañado de responsabilidad social y respeto por los derechos de quienes trabajan.
Ante este escenario, vecinos, organizaciones sociales y trabajadores hacen un llamado a la conciencia colectiva del pueblo de Tanti, instando a no naturalizar ni tolerar situaciones de abuso o explotación laboral. Asimismo, se solicita de manera urgente la intervención de las autoridades municipales, provinciales y de los organismos competentes en materia laboral y de derechos humanos, para que se investiguen los hechos denunciados y, de corresponder, se adopten las medidas y sanciones previstas por la ley.
La protección de los trabajadores, el respeto y la legalidad no son opcionales. Garantizar condiciones laborales dignas, seguras y registradas es una obligación indelegable, tanto para los empleadores como para el Estado.
Esta nota busca visibilizar una problemática que, de comprobarse, no solo afecta a quienes desempeñan tareas en ese comercio, sino que interpela a toda la sociedad sobre el tipo de comunidad que se desea construir.
