El kirchnerismo duro lanzó una ofensiva total sobre Axel Kicillof para que se pronuncie en favor de Cristina para la presidencia del PJ en el acto del 17 de Octubre que encabezará este jueves en Berisso. «Si Axel no se pronuncia en favor de Cristina en el Día de la Lealtad es la ruptura definitiva», afirmó a LPO un intendente peronista del Conurbano.
La interna del peronismo sigue sumando tensión tras la misteriosa reunión entre el gobernador bonaerense y la ex presidenta. Nada trascendió de ese encuentro a tal punto que ni siquiera se confirmó si la charla se concretó o no, pero en el peronismo bonaerense afirman que se produjo el lunes pasado.
«El silencio de Axel es doloroso», dijo este jueves Anabel Fernández Sagasti. «No sé cómo entre Cristina y Quintela no sabe a quién elegir. Me imagino que no es a Quintela, pero no lo ha dicho», expresó la senadora. Sagasti es la mano derecha de Cristina en el Senado y su declaración hay que entenderla como un mensaje directo de la ex presidenta a Kicillof.
Como contó LPO, Cristina Kirchner busca abrir una negociación que permita esquivar el enfrentamiento y cerrar una lista de unidad. Incluso este miércoles se mencionaba en La Plata, que Cristina habría pedido que se levante el acto de Berisso. El sábado próximo deben presentarse las candidaturas y la ex presidenta intentará hasta último momento lograr que Quintela desista. Parece difícil que el gobernador se postule si no tiene el apoyo de Kicillof.
Tensión en el Peronismo: La CGT se suma al acto de Kicillof y Cristina busca abrir una negociación
Los dirigentes camporistas presionan a Kicillof para que dé muestras de lealtad, a pesar de que había trascendido que impulsaba la candidatura de Ricardo Quintela y su ministro Andrés «Cuervo» Larroque invitó al riojano al acto de Berisso. Pero Kicillof no hizo ninguna declaración pública al respecto.
En el entorno de Cristina hay especial fastidio con el nuevo axelismo que integran según la mirada del Instituto Patria: Larroque, Cristina Alvarez Rodríguez, Gabriel Katopodis, Mario Secco y Jorge Ferraresi, este último es mencionado como el hombre que detonó la relación entre Kicillof y Cristina, que no casualmente este jueves desembarcó en Avellaneda sin avisarle. Una declaración de guerra total.
Las señales de emancipación política de Kicillof son contundentes. Este miércoles se mostró en un acto en La Plata con Ferraresi y con Santiago Caputo. En el camporismo el ex jefe de Gabinete y canciller de Alberto Fernández es mala palabra. Se sumó ayer otro desafío: el chaqueño Jorge Capitanich, nombrado por Kicillof en el Bapro, respaldó la candidatura de Quintela al PJ. Este jueves corrigió en el aire ese posicionamiento.
En La Plata por ahora resisten los embates del kirchnerismo duro y subrayan que todos los dirigentes con los que está molesta Cristina, fueron impulsados por ella y por Máximo. «Son ellos los que se pelean con todo el mundo», afirmó a LPO un dirigente enrolado en el axelismo.
Como sea, a la declaración de Sagasti se sumó este jueves Mayra Mendoza: «Me llama la atención que Kicillof no se haya manifestado en función de la candidatura de Cristina, luego de las oportunidades que tuvo en su vida por la confianza de la ex presidenta».
Kicillof encabezará este jueves el acto por el Día de la Lealtad en Berisso, organizado por el intendente local, Fabián Cagliardi y también por Mario Secco, de Ensenada y Jorge Ferraresi. Los tres impulsan una postulación presidencial de Kicillof para 2027. La CGT también se sumó al acto, que ya es visto como un acto anticristinista.
Cristina había planteado que sólo sería candidata en caso de haber una lista de unidad, pero con un desafío tan abierto a su liderazgo político cuesta imaginar que ahora declina su postulación, que además tiene un vínculo con sus problemas judiciales.
Como reveló LPO, en el cristinismo creen que ante las dificultades económicas, el presidente Milei se tienta con la idea de impulsar su detención. «Si Cristina es presidenta del principal partido de la oposición y la meten presa, Milei es Maduro», afirmó a LPO un dirigente cristinista, blanqueado ese ángulo.
Pero no es el único. Es verdad que la emancipación política de Kicillof es vista en el entorno de la ex presidenta como prematura. «Ella sintió que la querían jubilar», resumió a LPO otro dirigente cercano a la ex presidenta.
Fuente: lapoliticaonline.com