Las fuerzas rebeldes de Siria tomaron el control de Homs, la tercera ciudad del país y avanzan hacia Damasco, la capital y hablan de la posibilidad que el presidente Bashar Al Assad se vaya del país.
Según informaron diversas agencias internacionales, el avance de las milicias islamistas lideradas por el grupo Hayat Tahrir al-Sham (HTS) comenzó la semana pasada y ya controlan Aleppo, Daraa, la ciudad granero desde donde se iniciaron las protestas en 2011, y Sweida, ciudad de mayoría drusa y hostil al régimen.
La retirada de tropas de las provincias de Daraa y Sweida podría coincidir con la necesidad de enviar refuerzos masivos a Homs, la tercera ciudad de Siria con una gran comunidad de minoría religiosa alauita, la misma que la familia Assad, para defenderla al menos parcialmente. Según algunas fuentes locales, los rebeldes ya han entrado en el suburbio de Jaramana, una zona de mayoría drusa y cristiana.
Las conquistas de las fuerzas anti-Assad marcan un giro sorprendente para el presidente sirio, que parece cada vez más aislado. Rusia , su principal aliado, está centrada en la guerra de Ucrania, mientras que Hezbolá, que anteriormente había enviado miles de combatientes para apoyar a las fuerzas de Assad, se ha visto debilitada por un conflicto de un año con Israel. Sin embargo, los medios de comunicación libaneses, citando fuentes cercanas al Partido Libanés de Dios, informaron de que tienen la intención de enviar 2.000 soldados para apoyar a Assad.
Rebeldes tomaron Alepo y Siria se convierte en un nuevo centro de guerra global
Irán también ha visto gravemente afectadas sus milicias en la región sirio-libanesa por los recientes ataques aéreos israelíes. Y por las operaciones dirigidas contra dirigentes iraníes y de Hezbolá.
Rami Abdurrahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, informó que los asesores militares iraníes han empezado a abandonar Siria, mientras que los combatientes proiraníes, procedentes principalmente de Afganistán y Pakistán, se retiran hacia el centro del país.
«Facciones rebeldes entraron en la ciudad de Homs y tomaron algunos barrios, después de que las fuerzas de seguridad y el ejército se replegaran de sus últimas posiciones en la ciudad», declaró Rami Abdel.
La ofensiva rebelde, que comenzó el 27 de noviembre, está dirigida por el grupo yihadista Hayat Tahrir al-Sham (HTS) que tiene su origen en Al Qaeda y es considerada una organización terrorista por Estados Unidos y la ONU. Su líder, Abu Mohammed al Golani, dijo que que el objetivo de la ofensiva es derrocar al Gobierno de Assad.
En un comunicado, el ejército sirio dijo que se estaba reposicionando en las provincias del sur debido a los ataques a sus puestos de control por parte de «terroristas». También anunció la creación de un «cinturón defensivo y de seguridad fuerte y coherente» para proteger Damasco desde el sur.
Mientras tanto, en Qatar, los ministros de Asuntos Exteriores de Irán, Rusia y Turquía se reunieron para debatir la situación. Turquía, principal sostén de los rebeldes, criticó a Assad por no haber aprovechado el periodo de relativa calma de los últimos años para abordar los problemas internos del país. «Assad no ha aprovechado la oportunidad para iniciar un diálogo y restablecer una relación con su pueblo», declaró el ministro de Asuntos Exteriores de Qatar, Sheikh Mohammed bin Abdulrahman Al Thani.
La geografía define los límites de la política internacional
Por su parte, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado en su red social que «no quiere tener nada que ver con la política en Siria, aunque durante su anterior mandato llevó a cabo una campaña militar contra el autodenominado Estado Islámico en el este de Siria y el noroeste de Irak que condujo a la derrota militar del califato».
Como publicó LPO, los rebeldes tomaron el control de Alepo y Hama, a unos 150 kilómetros de Homs. Una eventual caída de Al-Assad es una pésima noticia para Rusia que tiene la base de Tartus, estratégica para la salida al Mediterráneo e Irán que pierde un aliado clave en la pelea con Israel por el control de Medio Oriente.
Fuente: lapoliticaonline.com